Para todos. (2 de abril de 2007)

Hace algun tiempo, en otro space
escribi cosas tristes, agradecimientos a mis amigos
y recuerdos gratos. Hoy, mucho de eso a cambiado
y como este es un nuevo space, hay que escribir cosas nuevas... ¿no?

Estos ultimos dias han estado llenos de sensaciones,
en su mayoria muy buenas... y hay otras un poco malas, pero que no
logran opacar a lo bueno

Veamos que tal sale esto.



Despierto, sorprendido, pues no recuerdo como llegue
aqui, el pasto esta frio, humedo.
sonidos a mi alrededor me hacen recordar
que no estoy en casa, que no estoy
dentro de mi... y no tengo idea del por que.
A mi alrededor; arboles ancestrales
tan altos y frondosos que muy poca de la luz
del sol alcanza a iluminar el lugar.
No tengo idea de que hacer,
hacia donde ir,
estoy solo en medio de la nada... y por primera vez
eso esta bien.
Es una soledad que no agobia, si no que da paz
que permite respirar, permite vivir,
no presiona, no manipula... no asusta.
En las bolsas de mi pantalon encuentro
una navaja, una linterna, una pequeña libreta
y una pelotita; curiosos objetos, que me doy cuenta, me
han acompañado a lo largo de mi vida. Se que gracias
a ellos, podre superar cualquier prueba.
Comienzo a caminar, disfrutando el
paisaje, con un rumbo que ni yo mismo conozco
pero que se, me llevara a algun sitio seguro.
Despues de un tiempo siento una presencia,
algo que me atrae, que me hace caer
en una red de calor... de tranqulidad
y me dejo llevar.
Abro los ojos para voltear y ver que me acompañas,
y me asusto cuando en un segundo te desvaneces;
escucho tu cantar y te sigo aunque no te pueda ver.
Llego a un claro, ahi estas tu, tomas mi mano
y sin decir palabra me llevas por un sendero
donde tu contacto me hace flotar en lugar de caminar.
Me das algo de miedo pues soy sensible
a tus hechizos, aun cuando los lances sin
pretenderlo. Te basta no hacer nada para que me sienta
preso de ti... y eso... creo, esta bien.
No puedo leer tus ojos, tu rostro es inescrutable,
no puedo saber que piensas, que sientes, solo veo,
solo siento, y me dejo llevar.
Depues de un tiempo una voz suena en mi cabeza,
es la tuya, me dice palabras que iluminan
mi mente y alegran mi corazon. Son sinceras...
y sin embargo, me turban.
Pasan las horas y nisiquiera las siento, nos detenemos
un momento, tomas mis manos
y me ves a los ojos, y en ese momento
descubro mi debilidad ante ti, aunque creo que tu
aun no te has dado cuenta.
De pronto hay tension, una sombra acecha,
y en el momento en que ataca veo su rostro... naja.
Su colmillo me roza, su veneno invade,
pero no sucede nada, tantas mordidas me han
hecho inmune.
Te protejo, naja no puede hacer mas daño
y se retira, haber si alguien mas cae en su trampa.
Pasado todo, se hace de noche, la luna se asoma
un poco entre las nubes, y despues de una pequeña caminata
y algo inocente que parecio sugerente
llega la hora de despedirme de ti;
un abrazo, y antes de que me de la media vuelta para irme
pronuncias dos palabras que dan
un vuelco a mi corazon...